Seguramente os habrá pasado. A veces te gusta la parte de delante de una camiseta pero no la de detrás y en otra camiseta o camisa puede que ocurra lo contrario. Entonces ¿Por qué no unir las partes que nos gustan y obtener al menos una camiseta que de verdad nos encante?.
Si una prenda se ha quedado estrecha hay muchas formas de ensancharla que incluso mejoran el diseño original.
Si se quedó corta pasa lo mismo porque se puede alargar de mil maneras y conseguir que el resultado sea más atractivo que al principio.
Muchas veces ocurre que tenemos ropa que nos compramos en su día o nos regalaron y nos gustaba, pero a lo mejor ahora ya no nos gusta tanto o podría gustarnos sólo con que ...
Si te pones la ropa delante del espejo y te preguntas: ¿Qué tendría que cambiar para que me gustara o me quedara bien de verdad?
A menudo la respuesta es muy sencilla. Hay que ajustar un poco de aquí o de allá, subir o bajar un dobladillo o coser cualquier tipo de aplicación para dar de nuevo vida a la prenda y conseguir que otra vez te apetezca ponértela.
Otras veces el caso es más desesperado y parece que es imposible que lo que te has puesto te vuelva a estar bien. Entonces piensas en darlo o tirarlo directamente.
Para mí esos casos son los más divertidos porque pienso con más libertad los cambios y los resultados son mucho más valientes.
Os aconsejo que vayáis de compras a vuestro armario, seguro que os sorprendéis.
Tengo la intención de crear un blog donde incluir las cosas que voy haciendo. Llevo toda la vida redecorando mi ropa pero sólo recientemente empecé a fotografiar el resultado, de modo que no tengo demasiado para enseñaros pero ahí va. Os muestro algunos ejemplos.
Mientras diseño mi nuevo blog he añadido esta pestaña a "mardelana".
Espero que os guste y que os dé algunas ideas.
1) Pantalón beis con aplicaciones:
Este pantalón básico estaba un poco estrecho de cintura y además tenía un pequeño agujero en la rodilla que había que reparar.
Le puse una cuña en las costuras laterales para ensanchar la cintura y después le cosí encima unas trabillas de la misma tela obtenida de la parte interior de la cinturilla. Esa es la parte aburrida porque luego diseñé para el lateral este juego de aplicaciones de telas y materiales distintos para conseguir el resultado que podéis ver. Hueso, madera, metal y tela de un vaquero negro.
2) Camiseta de hojas rojas:
Esta camiseta blanca básica se había quedado un poco estrecha y además tenía un escote demasiado bajo que resultaba incómodo.
Lo primero fue descoser los costados e insertar una tira de licra negra para conseguir ensanchar tanto el contorno como la sisa. Después coloque una banda negra centrada para tapar el escote y obtener un cuello casi "barco". Sobre esa banda cosí hojas realizadas a ganchillo con lana roja y le coloqué remaches metálicos formando curvas. El resultado es el que veis.
3) Camiseta negra de hojas blancas:
Yo tenía una camiseta de tirantes que me gustaba por delante pero no por detrás porque el tejido era muy flojo. Se me había quedado estrecha sin ponérmela precisamente por lo que os acabo de explicar. También tenía un jersey negro corto y de tirantes de muy buen tejido pero que nunca me gustó mucho como me quedaba.
Descosí la parte delantera de la camiseta. Al jersey le hice dos cortes que dejaban de una pieza la espalda y 8cm más o menos de delantero a cada lado y un trozo central independiente.
Cosí la camiseta al jersey y con el trozo central suplementé la camiseta tanto por delante como por detrás de forma que lo convertí en cuello "barco" que es mi preferido. Luego utilicé los tirantes de la camiseta para completar los hombros de esta nueva prenda.
Terminé de decorarla a mi estilo con hojas de ganchillo blancas y remaches metálicos. Ahora es una de mis camisetas favoritas.
4) Camiseta blanca:
Esta era una camiseta muy básica con un tejido bastante ligero. Tenía un bolsillo muy grande desde la sisa hasta el bajo, sólo en un lado. Era además muy larga y estrecha.
Le descosí el bolsillo y lo corté longitudinalmente para obtener dos tiras de unos 10cm. Desmonté los costados de la camiseta y los suplementé con las tiras mencionadas.
Acorté la prenda y rehice el dobladillo. Con el tejido que obtuve realicé un diseño que se amoldara al cuello y lo cosí como una aplicación.
Finalmente la camiseta queda mucho más bonita, equilibrada y sobre todo única.
5) Pantalón vaquero azul:
En este caso se trata de un pantalón vaquero clásico, un poco acampanado.
Le hice una decoración similar a la del pantalón beis pero un algo más ingenua.
Utilicé tela de otros vaqueros, tela gris de algodón, remaches metálicos, apliques de ganchillo blanco y gris metalizado y una sola pieza roja de cristal.
6) Pantalón negro con salamandras:
Este pantalón lo hice con un retal que tenía guardado y sacando el patrón de otro pantalón ya muy usado que siempre me gustó.
Lleva una cinta para ajustarlo a la altura de la cadera.
Para animarlo le cosí dos salamandras grandes y de distinto color en el lado derecho. Por si acaso quedaba demasiado discreto, lo decoré con algunos remaches metálicos y unas piezas de cristal.
7) Camiseta con aplicaciones de color naranja:
Este es un caso idéntico al de la camiseta con hojas blancas. Se reemplaza la parte de la espalda y se aumenta el contorno. Se sustituyen los tirantes por cuello barco y finalmente se decora con aplicaciones de ganchillo de formas serpenteantes entrelazadas de color naranja.
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